HESICASMO

Bienvenidos. Este es un blog dedicado a la espiritualidad y, en especial, al hesicasmo, la vía mística de la Iglesia Cristiana Ortodoxa.
En la columna de la izquierda se incluyen textos sobre el hesicasmo (fundamentos, práctica, historia, biografías, frases para meditar, etc.) En la columna de la derecha se presentan mis meditaciones y aportaciones, modestas aportaciones, a esta vía mística. Os agradeceré vuestros comentarios que, a buen seguro, nos harán bien a todos.
La Paz de Dios sea con todos nosotros.

¿Ya os habéis olvidado?

HAITI: más de 500 muertos por cólera. El Servicio Andaluz de Salud está preparando atención médica, aquí en España, para varias decenas de niños haitianos. Algunas ONG's están recogiendo fondos para cubrir los gastos de viaje y estancia de padres e hijos. Y ¿tú que haces?

jueves, 23 de junio de 2011

La naturaleza

Estaba hoy (Esta entrada fue escrita el 21 de Junio. Aún no se porqué motivo no lo fue. Os pido disculpas) abrazado a mi amigo el árbol, cuando se me ocurrió preguntarle: “Dime ¿eres feliz?”. Mi amigo me respondió: “Sí, muy feliz, aunque bien es cierto que no siempre fue así.”


Cuando nací me dejé arrastrar por las corrientes de la vida, el viento me acunó y me llevó por y hasta donde quiso y allí me dejó. Quise moverme, pero no pude; gritar, pero la voz no salía de mi cuerpo; mirar, pero no tenía ojos. Lo pasé francamente mal. Un día me empezaron a salir piernas y brazos y en mi torpeza pensé que había llegado la hora de mi libertad. Pero, para mi horror, mis brazos y mis piernas solo contribuyeron a atarme más y más a la tierra. Uno de aquellos brazos, sin embargo, empezó a crecer, a separarse de la tierra, a acercarse al cielo. Y mi esperanza se renovó: ¡Pronto volvería a marchar con el viento! Pero mis flexibles ramas de entonces no oponían resistencia suficiente al viento y éste no pudo llevarme consigo. Cuando mi tronco endureció y se opuso al viento, mis raíces habían crecido tanto que el viento no tuvo fuerza para arrancarme de la tierra. ¡Arrancarme de la tierra…! Esa fue mi obsesión durante muchos años. Quise volar como los pájaros, pero yo no tenía alas. Quise correr como los perros, pero mis patas no se movían. Quise hablar como hablas tú, pero solo me salía el murmullo del viento al atravesar mis ramas.

¡Fueron años muy tristes! Pero, ahora es diferente. Ahora, soy consciente. Sé de mi utilidad. Soy el refugio de los pájaros, el descanso del peregrino, el alivio del perro, la regeneración de la Tierra. La Tierra me alimenta y yo alimento a la Tierra. Por eso te digo, mi amigo, disfruta de TU VIDA, es la que te ha tocado o la que tú has pedido: no sueñes con volar si no eres pájaro, no sea que envejezcas sin haber andado.

1 comentario:

  1. Lindo cuento... me hizo recordar la leyenda andina del quirquincho músico... con un final no tan feliz cómo el del árbolito, pero es porque el árbolito tomó mejores decisiones que nuestro espinoso amiguito...:
    http://www.youtube.com/watch?v=MKVJmoEm-lc

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